Los animales mas o menos logran comunicarse con nosotros, el problema es que no estamos habituados a escuchar a los que no nos llaman por nuestro nombre y nos dicen las cosas como la gente, pero ellos no pueden, pues no son personas y no tienen la capacidad de hablar y esto podría lograr que dejaramos pasar muchas cosas por alto.
Si ellos lograran emitir palabras, tal vez nos sorprenderíamos pero a más de uno nos reclamarían por maltratarlos, a veces por humanizarlos como tratabamos en editoriales anteriores, y otras veces por ignorar sus necesidades.
Muchas veces ellos toman conductas inadecuadas como beber de la taza del baño, hacer sus necesidades al interior de la casa y hasta robarse comida de la mesa, cuando no lo tienen permitido, pero eso no obedece a un mal comportamiento de ellos, sino a una negligencia de nuestra parte.
Pues si nosotros salimos o hemos decidido quedarnos a dormir en casa, tenemos la facilidad de ir al baño cuando nos plazca, pero aún con el frío o con las prisas, ellos también deben hacer sus necesidades y por lo tanto una prioridad debe ser sacarlos a orinar y defecar en los lugares que hemos asignado, o llevarlo a pasear y levantar las heces de la vía pública.
Del mismo modo ellos necesitan comer y beber, ya sea que se queden dentro de la casa con nosotros o solos, debemos recordar que lo primero antes del descanso o la diversión es dejarles su agua y alimento para que coman, todos comemos y bebemos, ellos también, como seres vivos que son.
Algunos son muy buenos y se torturan con hambre y con ganas de hacer del baño hasta que ya no pueden más, en algunos casos se han reventado los intestinos y la vejiga, entonces si no quieres estas desgracias y sabes bien que fue tu culpa ese comportamiento indeseado, no lo reprimas, mejor limpia el desastre y ten en cuenta que tú propiciaste esto, y si no quieres que se repita, entonces, la próxima vez asegúrate de no olvidarte de él, como él n ose olvida de ti.
Esto es sólo lo básico y lo más común que ocurre, pero qué pasa cuando estpan débiles o tienen dolor de cabeza, ellos no pueden ir por un analgésico y mucho menos acudir al MVZ por su propio pie y decile, fíjese que me pasa esto, qué me receta, pero tú como responsable del animal debes estar al pendiente de todas sus necesidades y en cuanto haya alguna anomalía, acudir con el profesional de la salud animal (en la especie que cuidas), par que te ayude y lo atienda.
Jamás esperes a que el animal esté completametne decaído para atenderlo, al primer síntoma llévalo.
Es verdad que en ocasiones los acostumbramos a "hacerse los chillones", porque aprenden a chantagearnos, pero puedes asegurarte si se trata de un chantaje o de algo real, simplemente acarícalo y atiéndelo para que sepa que estás conciente de que ahí esta y que está captando tu atención, si como sin nada se recupera, fue un arma para que le hicieras caso, pero si no mejora, es momento de correr al veterinario, no es un juego y en verdad se siente mal.
Todo es curable si se trata a tiempo, así que ponle atención. (Editorial / Sara Arellano)
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